La cineasta Claire Denis nos presenta la película Les salauds (Los canallas), un filme de suspense, misterio, sexo y manipulación, que encierra una historia más que estremecedora, y que mañana, 21 de marzo, aterriza en nuestras salas.
Marco Silvestre (Vincent Lindon) es un hombre que ha adoptado la típica vida del rol masculino: es capitán de un barco petrolero y se dedica en pleno a ello. Sin embargo, un día tiene que abandonar sus planes y volver a París para ayudar a su hermana Sandra (Julie Bataille), que está pasando uno de los peores momentos de su vida: su marido acaba de suicidarse, el negocio familiar está en quiebra y para colmo, su hija Justine (Lola Créton) está ingresada en un hospital psiquiátrico. Sin embargo, Sandra cree que su marido ha sido asesinado y culpa de ello a Edouard Laporte (Michel Subor), además de acusarle de todo lo que le ha pasado desde entonces. Marco quiere ayudar a su hermana y para ello hará lo que sea necesario, incluso llegándose a mudar al edificio donde reside la amante de Edouard, que tiene mucho que ver en la resolución del misterio. De esta forma se embarca en una peligrosa investigación para vengar a su familia; pero él no contaba con los secretos que Sandra nunca le había contado.
La película es una adaptación de Los canallas duermen en paz, un thriller de 1960 del célebre cineasta Akira Kurosawa, y Claire Denis ha querido resaltar la importancia del título de la película original, manteniendo la palabra esencial: Canallas. Para ella, la existencia de la cinta nipona “fue toda una inspiración” a la hora de construir su propia historia.
La trama principal fue el aspecto que estuvo más claro desde el principio, tanto es así que según Denis “todo estaba calculado, incluso la escena final, que era uno de los aspectos más relevantes”. Es una película cuidada hasta el más mínimo detalle, con un gran trabajo de montaje, teniendo en cuenta muchas escenas que finalmente no se incluyeron, pero que fueron fundamentales para poder seguir montando. También hay que destacar la importancia de la música, que va en consonancia con el mensaje que se quiere transmitir en cada minuto de la cinta. Las imágenes cobran un especial protagonismo en este sentido, por ellas nos hacemos una idea de lo que Denis nos ha querido enseñar.
Con este trabajo la directora ha querido mostrar su opinión acerca de algunos aspectos presentes en nuestra sociedad que suelen presentarse como algo trivial u oscuro como el sexo, representado por el personaje de Laporte y su amante. El tono del film es misterioso, en palabras de la propia Claire Denis “todos los personajes son algo turbios, incluso Marco, que escoge el ideal de vida masculina”. Cada personaje tiene un papel específico, escogido cuidadosamente, aunque como en toda cinta, unos son más importantes que otros, como Sandra. Según la cineasta, “ella es el hilo conductor de la historia”.
Habrá que esperar hasta final de mes para poder descubrir los secretos que esconde esta historia.
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Imágenes presentación de la cinta en Madrid: Iris Sen Bravo
