Kazumi Yumoto ha conquistado, de nuevo, las novedades de las librerías españolas con su última novela publicada en nuestro país: Viaje a la costa. Ya el año pasado, Nocturna Ediciones nos sorprendía incorporando la primera autora japonesa a su catálogo. El éxito que cosechó la novela titulada Los amigos, que ya había sido premiada con el JAWC al nuevo talento y con el Boston Globe-Horn Book y el Mildred L. Batchelder en Estados Unidos, y las buenas críticas recibidas favorecieron la publicación de esta segunda novela. Confesamos que la espera se nos ha hecho larga y que estábamos deseando sumergirnos de nuevo en las historias de esta autora.
Viaje a la costa comienza con el inesperado regreso de Yusuke, un hombre desaparecido hace tres años y cuyo cuerpo fue devorado por cangrejos en el fondo del mar. Esta situación insólita ocurre mientras la esposa, Mizuki, cocina bolitas de shiratama, un plato japonés que su marido degustaba con agrado. Los dos protagonistas inician un viaje hacia la costa en el que conversan y reflexionan sobre su relación, su vida y su pasado, estableciendo paradas en la ruta para presentarnos a distintos personajes que resolverán algunos misterios sucedidos en meses anteriores. Este enigma, que se irá desvelando capítulo tras capítulo, estimula a los lectores a plantearse su realidad cotidiana y a recapacitar sobre la importancia del momento y la imposibilidad de retroceder en el tiempo.
En comparación con Los amigos, Viaje a la costa es una novela mucho más madura y melancólica que su predecesora poseyendo las dos obras, en todo caso, esa sensibilidad tan característica de la literatura del país del sol naciente. Esta última es, además, menos inocente y tierna que Los amigos, debido a que, en esta ocasión, los personajes se encuentran en la madurez: su travesía es más esperada, más previsible. Siendo el viaje el motor en ambas obras, en Viaje a la costa se aprecia un mayor lirismo y capacidad de introspección. Es indudable que Kazumi Yumoto sabe transmitir una sensación de paz y armonía en el lector que, pese a la dureza de las tramas, logra continuar leyendo con emoción y verdadero placer.
Es una lástima que, a día de hoy, la autora no sea muy conocida en nuestro país, a pesar de que la literatura japonesa está en auge y gana adeptos cada año, y nos apena que muchos lectores aún no se hayan acercado a una de sus obras. Sin embargo, estamos convencidos de que tarde o temprano os encontraréis con la desolación de Mizuki ante la pérdida de su amor o con Yamashita , Kiyama y Kawabe, los niños de Los amigos, que todavía están explorando el mundo en el que viven. Acordaos de la recomendación de La Huella Digital cuando descubráis la maravillosa narrativa de Yumoto.