Tras seis temporadas es inevitable cogerle cariño a la protagonista absoluta de «The Good Wife», una serie de largo recorrido, que año tras año está entre las más valoradas por crítica y público. Alicia es una esposa engañada, humillada ante la opinión pública por los líos de su marido, que hace seis años tuvo que coger el toro por los cuernos y volver a trabajar como abogada. Esto puede espantar a todos los que piensen que estamos ante otra más de abogados. Craso error porque «The Good Wife» tiene algo diferente.
Producida por los hermanos Ridley Scott y el fallecido Tony Scott, conjuga muy bien el caso de la semana con su trama principal y al ver el episodio piloto descubres ese algo diferente. Una imagen marca el inicio, esa Alicia ante los flashes de la rueda de prensa que será un punto de inflexión en su vida. Asistimos a la evolución de como una mujer apocada, tímida, insegura, se convierte en una mujer fuerte, capaz de tomar sus propias decisiones y asumir las consecuecias. Julianna Margulies ya acostumbrada a sufrir como la enfermera Hathaway de «Urgencias» ha conseguido sobrepasar el listón del que se suponía era el papel de su vida para dotar a Alicia Florrick de tal cantidad de registros y situaciones que tras tantas temporadas consigue que el telespectador entienda lo que le pasa a su personaje por la cabeza sin necesidad de hablar. Tras los impactantes sucesos de la quinta temporada todos somos mucho más «alicistas».
Y todo ello rodeada por los mejores. Por que si algo puede presumir «The Good Wife» es de tener unos personajes muy bien definidos con pequeñas pinceladas desde el primer momento, desde su primera aparición y que te apetece saber mucho más de ellos, algo que tras seis temporadas todavía consigue.
Will Gardner, es la pieza clave en la vida de Alicia. Es la persona que le da la oportunidad de reintegrarse a la vida laboral cuando nadie daba un duro por ella y de su mano emprenderá un camino lleno de sinsabores. La evolución de Will es sorprendente, muy similar a la de otro abogado de otra serie del mismo corte protagonizada por otra mujer… y hasta aquí puedo leer. Will empieza siendo un buenazo y atrapando al espectador en esa lucha interna y externa con Alicia, que sirve de leimotiv para la historia, y terminará siendo un tiburón devoratodo mostrando otra cara.
Podía seguir hablando del resto de geniales personajes, Diane, Cary, el cabrón de Peter Florrick, sus hijos Zach y Grace, la suegra, pero sin duda la que se lleva la palma y se puede considerar la otra protagonista en la sombra es Kalinda. La investigadora de LG es la que presta su apoyo a Alicia desde el primer momento, conectan desde el primer caso y esa complicidad a prueba de bombas le hará seguir con ella para lo bueno y para lo malo. Con una personalidad inquietante, un pasado turbio y que dará mucho juego (demasiado en mi opinión), y una vida sexual más que interesante se convierte en el toque diferente de la serie desde el principio. Archie Panjabi consigue hacerla sexy, sensual, mujer de armas tomar, exótica, apasionada en todo su esplendor interpretativo. Impresionante esos ojazos llenos de lágrimas y se la echa en falta cuando no comparte plano con Alicia.
Estoy seguro que los creadores de la serie vieron desde el primer momento la importancia de los secundarios y de los actores invitados. Por eso el plantel de estrellas que han pasado por la serie corta la respiración: el magnífico Michael J. Fox personaje recurrente durante toda la serie que aprovecha su enfermedad en la vida real para darle un toque entre tierno y tenebroso, Stockard Channing como la madre reencontrada y que está muy desmejorada físicamente pero no interpretativamente, Matthew Perry como rival político aunque siempre será Chandler, Amanda Peet como abogada militar, Matthew Goode como nuevo fiscal, John Noble el que fuera doctor Bishop de «Fringe» haciendo un papel muy similar de cliente peculiar y entrañable, Nathan Lane pasa de ser el amigo gay de «Modern Family» a pieza en el futuro de Alicia , Carrie Preston,….la lista es interminable. Otra prueba más de que es diferente.
Pero sin duda el invitado que llegó para quedarse en la segunda temporada es Eli Gold, asesor de campaña e inseparable de Peter Florrick, interpretado por el magnífico Alan Cumming, metomentodo, insoportable, pero con un corazoncito que iremos descubriendo más tierno de lo que parece. Sus encontronazos con la otra Señora Florrick, son míticos. Sus caras, sus gestos. Todo ello le ha valido el reconocimiento de la crítica obteniendo nominaciones a los premios Emmy y a los Globos De Oro por este papel.
Tras tantas temporadas puede que «The Good Wife» esté en su recta final. De hecho debería para no seguir el ejemplo de tantas otras series que se alargaron innecesariamente, pero la verdad es que gusta tanto ver a Alicia, a Kalinda y a Eli juntos que no me importaría que nos diesen otros seis años más.
Fotografías tomadas de:
Fotografía 1 de http://ib.huluim.com/show_key_art/15094?size=1600×600®ion=US
Fotografía 2 de http://thenypost.files.wordpress.com/2014/03/the-good-wife.jpg
Fotografía 3 de http://thejewelryloupe.com/wp-content/uploads/2011/07/Archie-Panjabi_300.jpg