Se ha ido el 2014 y desembarca un pletórico 2015. Entre medias, un paso de transición imperdible para cualquier fan televisivo: las campanadas de fin de año. ¿Quién ganó en audiencia? ¿Qué anécdotas se vivieron?… La Huella Digital, como siempre, te lo cuenta.
Feliz 2015, muy feliz 2015 os deseo y os deseamos desde La Huella Digital. Seguro que a estas alturas, huelleros, ya todos tenéis vuestra lista de buenos propósitos que jamás cumpliréis, vuestra cota de filantropía recargada hasta el día en que volváis al curro y esa sensación amarga de que no habéis comprado lo suficiente a pesar de que tenéis la cuenta en números rojos. Suele pasar, con el fin de año nos aceleramos, nos venimos arriba y necesitamos contar hasta diez. O hasta doce, como las uvas que nos comimos este año (por el norte por lo menos) durante la retransmisión de las campanadas, ese momento de especial unión que por repetirse sólo una vez cada año es digno de análisis.
La 1: la cadena pública llevaba ya el año entero poniéndose nostálgica con el lema “Parte de tu Vida” y la posterior buena promoción de sus espacios bajo este epígrafe. El día de fin de año no iba a ser una excepción y de este modo unió a Anne Igartiburu y a Ramón García en un único balcón, únicamente arropados por el rumor del público y la ya tradicional capa de Ramonchu, ya que Anne, aterida de frío, iba a cuerpo solamente para lucir vestido rojo Letizia. Barrieron en audiencia con un 40% de share; pasado y presente de la cadena miran al futuro. La primera en su ya tradicional magacín Corazón y el segundo en un nuevo programa de cultura general vespertino llamado El Legado.
TELECINCO y CUATRO: las segundas en el ranking de audiencia fueron las cadenas de Vasile, juntas, perdiendo un poquito más de la personalidad, eh, Cuatro. Sus presentadores o artífices de semejante espectáculo fueron el reparto de la serie El Chiringuito de Pepe. A destacar, la inefable pesadilla que fue aguantar a El Langui, Jesús Bonilla, Adrián Rodríguez y Dafne Fernández actuar como si vivieran a perpetuidad inmersos en su serie pasando un guion ensayado al milímetro, sobreactuados como ellos solos, para después sacar una croqueta gigante y sí, hacer un maratón con los chistes más manidos sobre los temas más destacados del año como Ortega Cano, la Pantoja o el rey. Compadecer al 14% de audiencia que siguió la emisión y una juanola para Dafne que casi se desgañitó al final de la emisión al grito de “Podemos”.
ANTENA 3: Hola, soy Anna Simón y pasaba por aquí. Hola, soy Carlos Sobera y te acompaño a presentar las campanadas de nuevo. Sigo sin entender por qué Antena 3 se emperra en colocar a presentadores secundarios o colaboradores para presentar sus campanadas, y más aún caras que ya hemos visto una y otra vez. Una Sussana Griso, un Arturo Vals o incluso un Pablo Motos hubieran lucido más que la sosaina de Anna y el ya visto Sobera. Aun así he de reconocer que fue un trabajo ímprobo el de dar paso a videos enlatados de campanadas pasadas y gritar los números de cada campanada con la boca llena. Indigestión de uvas, y de presentadores a sumar a la del croquetón de los del chiringuito. Un 9% optó por la rubia y el vasco.
LA SEXTA: Otro de los momentos más esperados de la noche era el de ver a Cristina Pedroche retransmitiendo las uvas. La de Vallecas, por la cual últimamente siendo adoración por su naturalidad y sencillez, está ascendiendo como la espuma y ya compagina Zapeando con Los Viernes al Show más alguna aparición estelar más en otros programas. Estaba radiante y a su lado Frank Blanco repitiendo presentación. Pero centrémonos en lo que importa, en Cristina, que, tras conocer su 10% de share dijo que le era imposible competir con la capa de Ramonchu, que ni aun desnuda, y eso que en un momento puntual de la noche enseñó sus buenas bragas negras. Bueno, bonita, para el año que viene, tú intenta a ver qué ocurre, que no sólo va a subir el share en casa. Mientras tanto, felicitar a La Sexta por su buen hacer e imponerse a Cuatro, la cual se diluye en el universo Mediaset.
PLUS: Si sonados fueron las meteduras de pata de Marisa Naranjo en el 89 (Ustedes distinguirán el sonido…) y de Irma Soriano en el 94 (¿Dónde está el reloj?), la campanada la dio este año Canal Sur que intercaló en su retransmisión publicidad. Andalucía entera se quedó con la boca abierta y las uvas en la mano. Pero lo mejor, sin duda, han sido a la postre las reacciones de las familias andaluzas que ya se pueden ver en diversas plataformas de videos. Un imperdible para empezar con una sonrisa este televisivo 2015.
PD: mi reflexión final de telespectador de hoy es: “Los que proyectaban con un láser la silueta del País Vasco para el acercamiento de presos han de estar muy contentos de los tres corazones, la vaca que ríe, el oso grizzlie… y demás siluetas que interpretaron la audiencia española cuando miraban la esfera del reloj.”
Fotografías propiedad de Rtve, Telecinco y A3Media respectivamente.