Una explosión de emociones dudas e historias entrelazadas por un delgado hilo que recorre cada una de las etapas de la vida es lo que le espera al espectador durante las dos horas que dura la trama. Paolo Sorrentino ha regresado a la gran pantalla con una película que rompe las barreras emocionales del espectador, enganchándolo, y haciéndolo sentir y reflexionar junto a los personajes.
El director italiano regresa a las salas tras el triunfo de crítica y público de La gran belleza, con la que logró entre otros premios, el de mejor película de habla no inglesa en los premios Oscar de 2014. Sin duda este reconocimiento es el que le ha permitido contar con actores de talla internacional en La Juventud, aunque anteriormente ya había dirigido a los oscarizados Sean Penn y Frances McDormand en Un lugar donde quedarse (2011) y participó en el film coral Rio, eu te amo (2014), donde cada director contaba una pequeña historia de amor en la ciudad de Rio De Janeiro. Además en el 2016 estrenará la serie de televisión Young Pope, coproducida por Italia, Francia, Estados Unidos y España, en la que Jude Law da vida al joven Papa Pio XIII acompañado por un reparto internacional en el que destacan Diane Keaton, Cécile De France, el español Javier Cámara o Ludivine Sagnier.
En esta ocasión ha llevado a cabo un proyecto ambicioso, buscando cautivar a todo aquel que se plante ante la gran pantalla durante el discurso de este film. Un largometraje en el que recorremos a partir de Fred Ballinger (Michael Caine), un gran director de orquesta ya retirado, un hotel algo particular, ubicado en los Alpes, junto a su amigo Mick (Harvey Keitel), un director de cine que aún no ha perdido la pasión por el cine. En esta especie de vacaciones Mick busca una última película que lo encumbre.
Una trama en la que no hay tiempo para el descuido. En ella se plasma la vida misma reflejada en historias artificiales, diseñadas por el cine, para el espectador. Se pasa de tratar los problemas físicos causados por la edad, a temas más dolorosos ligados también a la vejez, como la pérdida de memoria, mirando con frustración hacia atrás por los errores cometidos, o con una sonrisa en los labios al pensar en tu primer amor, desembocando en temas tan existenciales como la muerte o la libertad, u otros más banales como el puro disfrute o la belleza, desmontando prejuicios, y sobre todo, causando emociones de todo tipo. Rodeado todo por un aura cómica e irónica, acompañada de una fantástica banda sonora, que nos permite reflexionar sobre estos temas en ocasiones duros, sin olvidarnos de disfrutar con la película.
Para todo ello ha sido necesario además de un equipo técnico preparado, un reparto extenso formado por actores de la talla de Michael Caine, Harvey Keitel, Rachel Weisz, Paul Dano o Jane Fonda, que darán vida a los protagonistas de este último rodaje.
Todo ello ha hecho posible que, a pesar de que en España tengamos que esperar hasta el 22 de enero de 2016 para su estreno, La juventud ya haya cosechado galardones como los obtenidos en los Premios del cine Europeo, donde se alzó como gran vencedora llevándose el premio de mejor película, mejor dirección para Paolo Sorrentino, y mejor actor entregado a Michael Caine, además de nominaciones en los Globos de oro, a mejor actriz de reparto (Jane Fonda) y canción original, siendo esta última también candidata en los premios Oscar, y echando de menos en los mismos a Jane Fonda, doble ganadora de la estatuilla dorada, con Klute (1971) y una segunda ocasión con El regreso (1978).
Una película en definitiva con una aglomeración de temas y emociones, quizás en exceso, pero con cualquiera de esos excesos son de los que no quieres dejar de abusar.
