En los últimos años son varios los estudios dedicados, por un lado, a la censura franquista, entre los que destacan, en lo que se refiere al campo teatral, los de la investigadora Berta Muñoz, así como los dedicados a la utilización política del teatro en nuestro país, tanto en el periodo franquista como durante la Segunda República. Sin embargo, faltaba un estudio general de la censura teatral durante los años de la guerra civil, impuesta tanto por el bando nacional como por el republicano, y eso es lo que nos ofrece Catherine O’Leary, catedrática de literatura hispánica de la escocesa Universidad de St. Andrews, en La censura del teatro durante la guerra civil española. El libro ha sido publicado en la colección “Biblioteca crítica de la guerra civil”, de la editorial Guillermo Escolar, en la que también encontramos títulos tan sugerentes como el volumen colectivo Cultura y guerra civil o el estudio El esperpento durante la guerra civil.
En el libro que nos ocupa, O’Leary repasa, en primer lugar, la legislación sobre censura que se llevó a cabo en los dos bandos, destacando las diferencias entre uno y otro, es decir, cómo y sobre qué se ejercía la censura en ambos bandos y cuáles fueron los organismos y mecanismos que la gestionaron. Ofrece también un estado de la cuestión del teatro que se había llevado a cabo hasta el momento y cómo cambia durante la guerra para convertirse en un arma más para luchar contra (o a favor de) el fascismo. Cabe mencionar que la autora centra sus comentarios y análisis en la actividad teatral madrileña y en su idiosincrasia propia, que difería del panorama teatral de otros puntos de la república como Barcelona o Valencia. No por ello resulta menos interesante, en especial por toda la información de la práctica escénica durante ese periodo, de las compañías que la ejercían y del repertorio.
Sobre ello, en el cuarto capítulo del libro, O’Leary lleva a cabo dos estudios de caso, uno referente a un programa teatral republicano, que incluye obras de Rafael Dieste, Ramón J. Sender y Rafael Alberti, y el otro en relación con la obra breve falangista Bajo alas de Imperio, de Ángel del Castillo López. En ambos estudios queda patente cómo se aplicaba la censura en cada bando, a pesar de que los textos presentados fueran escritos por dramaturgos afines a cada uno de ellos, y cómo las obras reunían fórmulas dramatúrgicas similares para influir en las simpatías y en los odios del espectador.
Destaca el trabajo de investigación que sustenta esta publicación y la búsqueda archivística que requiere, que queda reflejada en la extensa y completa bibliografía y que, en parte, se ofrece también en los apéndices del libro, que comprenden las legislaciones republicana y franquista, fragmentos de la obra de Alberti y el texto íntegro de la obra de Ángel del Castillo. Estos materiales no hacen sino enriquecer el volumen, ya que no es usual tener acceso a textos de ese teatro de circunstancias, como se llama en el campo de los estudios teatrales a las obras propagandísticas políticas escritas y representadas en el contexto de la guerra civil. El volumen se completa también con una cronología de la censura durante la guerra y sólo echamos en falta un índice onomástico que facilitaría la consulta del libro en tanto obra de estudio y de referencia obligada para futuros trabajos acerca del teatro durante la guerra civil española y su censura.