El sello Toro Mítico, perteneciente a la editorial Almuzara, ha publicado recientemente Papá Piernas Largas, de Jean Webster, en una bella edición que incluye, no solo los dibujos originales que realizó la propia autora en 1919, sino también unas ilustraciones en color de Sara Lago para esta edición. Esta novela clásica juvenil se une a la colección “Clásicos juveniles”, en la que se encuentran títulos como Mujercitas en Nonquitt, de Louisa May Alcott, Los buscadores de tesoros y Los chicos del ferrocarril, de Edith Nesbit, la saga completa de Ana de las Tejas Verdes, de L. M. Montgomery, y Pollyanna, de Eleanor H. Porter. Debo confesar que Almuzara que se ha convertido en una de mis editoriales favoritas por estas colecciones tan emotivas y disfrutables.
Esta obra de Webster cuenta la historia de Jerusha Abbot, una huérfana de diecisiete años del orfanato John Grier, a la que permiten alojarse en la institución a cambio de realizar un duro trabajo diario, desde el cuidado de los niños hasta la limpieza y ayuda en la cocina. Sin embargo, gracias a una situación inesperada, su destino cambiará: comenzará una nueva vida, viajará a otro lugar, tendrá nuevas amistades y descubrirá nuevos intereses y aficiones. Los recuerdos sobre su orfandad, así como el carácter de la protagonista (su desparpajo y resolución ante los problemas, su capacidad para asombrarse de las cosas, su sentido del humor y su lucidez en algunas cuestiones) me ha recordado a Anne Shirley, la protagonista de Ana de las Tejas Verdes.
La novela de Papá Piernas Largas es una delicia. A partir del género epistolar, la joven protagonista nos cuenta todo lo que le sucede, desde las sorpresas y la conmoción ante lo desconocido, pasando por las desdichas del día a día, hasta las alegrías que conlleva descubrir el mundo que se encuentra tras las dependencias del orfanato. Todo ello está satinado con dulzura, sensibilidad y dosis de humor que nos harán enamorarnos de Jerusha Abbott o, como ella prefiere, Judy Abbott.
Jean Webster fue una gran activista por la igualdad racial, el sufragio femenino y la educación de las mujeres. De hecho, he detectado en la novela ciertas reivindicaciones feministas que intuyo que fueron polémicas en el momento de la publicación de la obra y que hoy, como mujer y como feminista, agradezco a la autora que las incluyera; también refleja los beneficios de la educación femenina en su personaje. La autora fue pariente de Mark Twain y escribió varias novelas que ojalá que la editorial Almuzara nos traiga en un futuro a nuestro país.
Recomiendo encarecidamente Papá Piernas Largas, de Jean Webster, a los que disfrutamos con los clásicos juveniles, a los que nos encantan las jovencitas avispadas y curiosas, y a los que nos gusta irnos a dormir con una sonrisa en los labios por la dulce historia que estamos leyendo.