
Vivimos en un constante cambio. Como se suele decir, la vida da muchas vueltas y no sabemos nunca cuándo va a llegar ese giro que cambie nuestro mundo por completo. Cuando lo hace y además en forma de tragedia, ¿Cómo podemos reconstruirnos?
De eso trata Demolición. Protagonizada por Jake Gyllenhaal, cuenta la historia de Davis Mitchell, un exitoso banquero de inversiones que intenta recomponerse emocionalmente tras la repentina muerte de su mujer en un accidente de tráfico. Puede que con este argumento parezca que nos encontramos ante el drama más lacrimógeno de los últimos años. Sin embargo, muy lejos de ser así, la película consigue sacar el lado más amable de una situación tan trágica.
Para empezar, poco después de saber que su mujer había fallecido, Davis Mitchell decide escribir una carta de queja hacia la empresa propietaria de las máquinas expendedoras del hospital ya que su pedido se queda enganchado en el momento posterior a que le comunicaran la terrible noticia. Puede que como una forma de canalizar sus emociones, el protagonista comienza a escribir periódicamente a esta empresa, contactando así con la misteriosa responsable de atención al cliente Karen Moreno (Naomi Watts) con quien comenzará una relación bastante peculiar.
Además, descubre que encuentra una especie de placer en romper sus pertenencias y todo lo que había construido junto con su mujer. Para iniciar una nueva vida decide romper literalmente la anterior. Es entonces cuando se da cuenta de los sentimientos reales que tenía hacia su esposa y que antes no había sido capaz de asumir.
Jake Gyllenhaal interpreta este papel protagonista y parece que hubiera sido hecho a su medida. Su brillante actuación hace que la película se convierta en una maravilla. Pero no sólo destaca su actuación en esta película, sino que Jake Gyllenhaal es un excelente actor y así lo demuestra en gran parte de su filmografía.
El camaleónico actor en los últimos años se ha metido en la piel de personajes completamente diferentes entre sí, tanto emocional como físicamente. En Nightcrawler (2014) nos encontramos con un Jake extremadamente delgado, con las facciones muy marcadas y sin nada de musculatura interpretando a un pobre reportero que intenta ganarse la vida grabando vídeos de los sucesos que tienen lugar en la noche americana. Tras esto, un año después estrenó Southpaw (2015), un drama en el que da vida a un boxeador acabado que trata de volver a ganar prestigio por el bien de su familia. Su transformación física de una película a otra parece casi imposible.
Si además echamos la vista atrás podemos encontrar multitud de largometrajes protagonizados por el actor que son de visionado imprescindible. Entre ellos destacan los siguientes:
- Donnie Darko (2001) puede que sea una de las mejores películas de intriga psicológica de todos los tiempos y aún hay mucha gente que no sabe de su existencia. Narra la historia de Donnie, interpretado por Jake Gyllenhaal, un chico americano que tras escapar de una muerte casi segura, empieza a sufrir alucinaciones y a comportarse de un modo muy extraño.
- Brokeback Mountain (2005): El joven actor saltó a la fama con este drama romántico tan popular en el que dos vaqueros estadounidenses se enamoran perdidamente. Un clásico del cine.
- Zodiac (2007): dirigido por David Fincher, en este largometraje encarna a un policía que se encarga de investigar los sospechosos crímenes cometidos por el llamado asesino del zodiaco. Es un título esencial para los amantes de las películas policiacas y de asesinos en serie.
- Dos películas con las que también reafirmó su fama fueron Prince of Persia (2010) y Amor y otras drogas (2010), la cual protagonizó junto a Anne Hathaway. Con un toque un tanto más comercial, dichos largometrajes son de géneros completamente diferentes y aun así, Jake supo interpretar ambos papeles a la perfección.
- Prisioneros (2013): junto a Hugh Jackman protagonizan este escalofriante thriller del cual pocos habrán oído hablar. En ella, Jake Gyllenhaal encarna de nuevo a un policía que se encarga esta vez de encontrar a dos niñas que han sido secuestradas. Es una película altamente recomendable y totalmente imprescindible.
- Por último cabe hablar de Enemy (2013). En esta ocasión el actor desempeña dos papeles pero que representan a la misma persona. Con un argumento bastante retorcido y subjetivo da lugar a múltiples interpretaciones de su significado tras verla.
Por el momento su trabajo ha sido premiado con un BAFTA a mejor actor de reparto por Brokeback Mountain, por la cual estuvo también nominado al Óscar en la misma categoría. Cuenta también con una nominación al Globo de Oro y al BAFTA por su actuación en Nightcrawler como mejor actor. También fue nominado a mejor actor principal en los Globos de Oro de 2011 por Amor y otras drogas. Parece que el ansiado Óscar se está haciendo esperar.
En definitiva puede decirse que Jake Gyllenhaal es uno de los actores más influyentes e importantes de los últimos tiempos y que ha culminado su filmografía con su último estreno, Demolición, la cual es la típica película que hace que no te quieras levantar de la butaca del cine aunque ya estén encendidas las luces y llega a los cines españoles el 1 de julio.