El pasado sábado 19 de abril, eran liberados cuatro periodistas franceses que llevaban diez meses secuestrados en Siria. Los cuatro fueron llevados a la frontera del país en la tarde del viernes donde unos militares turcos los encontraron atados y con los ojos vendados. Se cree que estuvieron en manos del Estado Islámico de Irak y del Levante, el grupo armado que también retuvo a los tres periodistas españoles ya liberados
Nicolas Hénin, Pierre Torres, Edouard Elias y Didier François son los cuatro periodistas franceses que han sido liberados tras diez meses de secuestro en territorio sirio. «Estamos muy contentos de estar libres. Damos las gracias a las autoridades turcas por su ayuda. Es una felicidad poder ver el cielo, caminar y hablar libremente” fueron las primeras palabras de Didier François. El Eliseo confirmaba la noticia de la liberación de los cuatro periodistas en la mañana del sábado tras diez meses de incertidumbre y negociaciones que por fin han logrado su objetivo. Laurent Fabius, jefe de la diplomacia gala, apuntó que la liberación ha sido fruto «deun trabajo largo, difícil, preciso y necesariamente discreto». De la misma forma, el presidente Hollande agradeció su esfuerzo «a todos aquellos que han permitido el feliz desenlace» y quiso compartir la alegría «con las familias que han aguantado con un gran sentido de la responsabilidad la angustia» vivida estos meses.
A su llegada, los cuatro periodistas relataban algunas de sus vivencias durante los meses de cautiverio: simulacros de ejecuciones, hacinamiento y falta de comida fueron algunos de los tratos a los que estuvieron sometidos. «Hubo pistolas en la sien o en la frente, pero los simulacros nunca me estresaron particularment
e, en la medida en que se veía demasiado que eran para meter presión», declaró François a la emisora Europe1, medio para el que trabaja. Según François los primeros días fueron los más duros: “Te meten enseguida en el ambiente. La presión es muy, muy, muy fuerte. Cuatro días sin comer y sin beber. Al cuarto día sin beber, empiezas a estar realmente mal, atado a un radiador, y golpeado».
Nicolas Hénin consiguió escaparse una noche pero fue atrapado de nuevo. Según François, la mejor manera de superar con éxito un secuestro es confiar en que las negociaciones lleguen a buen término: «La cuestión es saber si intentar algo es posible, y (los secuestradores) hacen todo para que no lo sea. No hay que tomarles por imbéciles. Saben lo que hacen». Por su parte, Edouard Elias, explicaba que «podría haber sido peor. Ha habido altibajos. Podemos caminar, tenemos buena salud. Es lo esencial”.
Los reporteros fueron secuestrados en momentos distintos. Primero Francçois y Elias fueron interceptados en un puesto de control al norte de Alepo el pasado 6 de junio, después Torres y Hénin, a quienes se les perdió la pista el 22 de junio en Raqqa. Se cree que estuvieron en manos del Estado Islámico de Irak y del Levante, la organización yihadista que mantuvo capturados durante seis meses a los tres periodistas españoles ya liberados.
A pesar de lo ocurrido, François y Elias no se arrepienten de haber ido: «Hice una elección. No somos inconscientes, intentas minimizar el riesgo, pero la decisión fue buena», explicaba François. Así mismo, el gobierno francés seguirá trabajando para encontrar a los dos periodistas que aún continúan desaparecidos en la zona del Sahel, Serge Lazarevicy Gilberto Rodríguez Leal.
Fotografía: EFE/ El País