El multitudinario Festival Cruïlla, que hasta ahora se celebraba en el Parc del Fòrum de Barcelona con cuatro días de conciertos en distintos escenarios y con artistas internacionales encabezando el cartel, ha cambiado la programación en tiempos de pandemia y apuesta este año por un nuevo formato adaptado a las circunstancias que están marcando este 2020.
Bajo el lema “menos es más”, el nuevo Cruïlla XXS, como el propio nombre indica, ofrece una versión (aparentemente) reducida del festival veraniego. Reducida en cuanto a presencia internacional en su programación, en cuanto a personas y escenarios en un mismo recinto, y en cuanto a horas seguidas de espectáculo. Pero aumentada y mejorada en otros aspectos. Lo primero que se ha tenido en cuenta con estas nuevas medidas es, obviamente, la seguridad de los espectadores y de los artistas asistentes al Festival.
La primera innovación señalada, en claro apoyo al sector cultural y artístico, es la inclusión de espectáculos de artes escénicas, de teatro, circo y danza, además de los musicales, así como un ciclo mucho más amplio de Stand Up Comedy. De este modo se ha querido también potenciar el talento nacional, con más de doscientos artistas del país, con trayectorias muy diversas. Podremos ver grupos como Els Amics de les Arts, M-Clan, Fuel Fandango y cantautores como Roger Mas o Marina Rossell; compañías escénicas y artistas como La Fura dels Baus, Les Impuxibles, Brodas Bros o Pepa Plana; y un ciclo de jazz, flamenco y clásica que acoge desde colaboraciones con el Liceo hasta el cantaor Antonio Lizana acompañado por Chano Domínguez, entre tantos y tantas otras. La nómina es muy extensa y os invitamos a sumergiros en el cartel para apreciar la variedad y generosidad de la propuesta.
No habrá conciertos de grande formato, con grandes despliegues técnicos como los que acostumbran en ediciones anteriores, sino que se apuesta por el acústico, por espectáculos de pequeño y mediano formato y por una mayor cercanía, dado la reducción de aforo, que será de cuatrocientos espectadores en cada actividad. Incluso encontramos actuaciones para público familar, como las de El Pot Petit, Dàmaris Gelabert o Tortell Poltrona. Se diversifican también los escenarios, más vinculados en esta ocasión con la capital catalana, como los jardines del Teatre Nacional de Catalunya o del Museu Marítim, el Poble Espanyol, el Camp Nou, o el Recinto Modernista de Sant Pau, entre otros. Y, finalmente, la última novedad es que, en lugar de ser cuatro días intensos, las actuaciones se reparten a lo largo de todo un mes, desde el 1 de julio hasta el 2 de agosto.
Las entradas para el Cruïlla XXS, cuyo precio oscila entre los 12€ y los 35€ según el espectáculo, pueden adquirirse a través de la web del festival, y ya hay eventos que las han agotado. La buena acogida que está teniendo esta apuesta y adaptación del festival, así como también otras iniciativas artísticas que tendrán lugar en las mismas fechas, como el Festival Grec, demuestra que la gente tiene ganas de recuperar las actividades artísticas y culturales a pesar (o tal vez a causa) de la crisis de la COVID-19 y los tres meses de confinamiento del que ahora salimos.